Una píldora de desahogo de un ciudadano corriente y moliente ante la desidia y el despilfarro institucional

23 abril 2008

Banca española millonaria

Un tal WILLY deja este comentario en euribor.com.es. Yo no puedo explicarlo mejor.

23-4-2008
Hola a todos

¿EN QUÉ MEDIDA ESTÁ AFECTADA LA BANCA ESPAÑOLA POR LA CRISIS DE LAS HIPOTECAS LLAMADAS SUBPRIME?

Todo parece indicar que la crisis financiera internacional persiste y no se vislumbran, a corto plazo, perspectivas de solución de la misma.
El lunes, Bank of America tuvo que comunicar al mercado que va a hacer una provisión de impagos debido la reducción de sus beneficios trimestrales, en un 77 %. Y, a su vez, National y Citigroup deben ampliar capital.

Por su parte, el FMI nos “regaló” con su informe para Europa; y, entre otras conclusiones relevantes, nos viene a decir que, los bancos europeos acumulan 80 mil millones de dólares en pérdidas. Eso en cuanto a las reconocidas. Porque, según dicho Organismo, han de salir otros 40 mil (millones.)

Si tomamos en consideración que este embrollo se desató a primeros de Agosto de 2007, considero que a los bancos les está costando, y mucho, confesar unos pecados que, según se aprecia, son abundantes.
Hasta la fecha, 80 entidades, en todo el mundo, han tenido que cuantificar en su balance, el impacto negativo de las hipotecas de, no ya alto, sino, altísimo riesgo.

Y, por su parte, el BCE nos augura un futuro “movidito”.

Curiosamente, en la “lista negra” de bancos afectados por la crisis no figura ninguna entidad española.

(¿Será verdad eso de que Spain is different? ¿Habrá algún otro motivo inconfesable?)

Hay un problema. No creo en la posibilidad de la “autarquía económica contemporánea”, y mucho menos en las “islas de la perfección”. Más bien, cuando alguien me quiere presentar un panorama idílico, hago como cuando he ido a comprar un coche: mirar los bajos y los pedales de mando.

Y es lo que voy a intentar hacer ahora.

Bien. La banca española actual se caracteriza por dedicarse fundamentalmente al negocio minorista (retail), es decir, banca de oficina tradicional. Y, en cambio, salvo algunas excepciones, no se ha lanzado de lleno a las procelosas (y muy rentables, cuando sale bien) aguas de los productos de inversión.

Por otra parte, durante estos años de bacanal financiera, los bancos españoles, al no disponer de sobrada liquidez, en lugar de comprar productos “bendecidos” (lease, derivados), se han dedicado a hacer paquetes de titulizaciones de hipotecas y los han colocado en los mercados internacionales. Paquetes que han terminado, entre otros, en fondos de pensiones y de jubilación; y que, a fecha de hoy, Dios sabe en manos de quien estarán.

Ello no significa que el mundo financiero español haya estado al margen de la comercialización de hipotecas en las que el porcentaje de cuota sobre ingresos netos supera el 50 %, ello, hecho, sobre un 120 % de la garantía hipotecaria, y concedido a personas con inestabilidad laboral.

Dichos productos han sido comercializados a través de Entidades de Financiación, algunas vinculadas a grandes bancos. Los han colocado mediante agencias inmobiliarias, o empresa de financiación.

En Octubre y Noviembre de 2007, la prensa financiera se hizo eco de que el Banco Santander había sido tocado por la crisis de las hipotecas llamadas subprime, a través de Sovereign, un banco norteamericano, participado en un 25 %, por el Grupo que preside el Sr. Botín.

¿SE PUEDE DECIR QUE LA BANCA ESPAÑOLA VA A SALIR INDEMNE DE LA ACTUAL SITUACIÓN, CON ORIGEN EN LA CRISIS HIPOTECARIA?

Bueno. Eso va a depender mucho de la evolución del mercado hipotecario y del de segunda vivienda, así como del rumbo que tome la morosidad.

Si nos atenemos a los últimos informes (rendición de cuentas de Bankinter, p.ej.) la morosidad está experimentando un incremento que, de seguir así, será alarmante dentro de no mucho tiempo. Y, por demás, las ventas de inmuebles están cayendo significativamente, a pesar de las estadísticas proporcionadas por el Ministerio de la Vivienda.

No me gusta nada la palabra subprime. Primero, porque los anglicismos no deberían caber en una lengua tan rica como la española, y segundo, porque la utilización de dicho palabro sólo provoca confusión, no aclara casi nada a los que no hablan inglés, y – además – responde a una realidad económica, la norteamericana, que funciona con parámetros y medidores diferentes a los nuestros.

En origen, la crisis subprime, es la provocada por la “manipulación indebida” de productos estructurados provenientes de carteras de titulizaciones. Eso es para el caso estadounidense, puede que, también, para el británico, y otros.

Pero, en lo concerniente a España, ésta, es la

CRISIS PROVOCADA POR LA VENTA Y COMERCIALIZACIÓN, REALIZADA DURANTE UN PROLONGADO PERIODO DE TIEMPO, DE ACTIVOS INMOBILIARIOS EXCESIVAMENTE VALORADOS, CUYO DESTINATARIO FINAL SON UNOS COMPRADORES CUYA SOLVENCIA RESULTA PROBADAMENTE INSUFICIENTE RESPECTO DEL PRECIO FINAL.

Son desencadenantes de la misma, la EXCESIVA CONCENTRACIÓN DE RIESGOS EN DETERMINADOS PRODUCTOS, como podrían ser los de la costa española, y de muchas urbanizaciones, que están prácticamente deshabitadas, cuyo paradigma podría ser la “ciudad secarral de El Pocero”. Aunque gran parte de la geografía de la piel de toro está plagada de ejemplos similares.

A resultas de lo anterior, se producen bajadas estrepitosas y significativas de los precios de dichos activos, acompañadas, éstas, de un aumento ostensible de la MOROSIDAD.

(Ya se está produciendo; ver también el último informe trimestral de Caja Madrid.)

Hay quien sostiene que, en España, lo último que se deja de pagar es la hipoteca. Entre otras cosas porque, a diferencia de otros contextos (p.ej., el anglosajón) en nuestro país, el impago de una hipoteca significa la anulación del individuo. En otras palabras, los defensores de dicha teoría, creen que los hipotecados van, tienen, que pagar, sí o sí.

No lo pongo en duda, aunque, es muy probable que se produzcan ejecuciones masivas de garantías hipotecarias, en medio de un escenario parecido al de la España de 1993, donde practicamente todo se vendía, y nada se compraba.

Amigos, los años de la fiebre del oro ya han pasado. Ese “El Dorado” de los despropósitos, engaños y tropelías se ha hundido; para los bancos y para todos los que han medrado al socaire de tan nefasta política monetaria. Ha llegado el final de un modelo económico basado en la farsa y la escenificación de una riqueza que nunca existió, y que se basó exclusivamente en el expolio del bolsillo de una ciudadanía anestesiada.

Esa política de jugar a la garrapata convertida en caballo, la de la utilización de los fondos estructurales europeos en aventuras favorecedoras de unos pocos, ha terminado.

Aquella búsqueda incesante de dinero en los mercados internacionales, esos riesgos (excesivos) que ha corrido la banca, para financiar las aventuras de fusión y concentración de constructoras e inmobiliarias, ahora endeudadas hasta las cejas, y un poco más arriba, cuando no quebradas, digo que, aquella aventura ha tocado a su fin.

También ha expirado el plazo para aquellas tasaciones y valoraciones desmedidas, irreales y poco creibles de activos (Adiós a la Triple A “a su medida”.) Sólo hay que echar un vistazo a las pérdidas multimillonarias sufridas por los grandes bancos de inversión (los verdaderos dueños, en exclusiva, de las valoraciones de activos.)

De paso, mirad lo que ha ocurrido con esos “entes” que se desplazan sigilosamente, siempre en la sombra, entre bastidores, y que me recuerdan a los gangsters; siempre escurridizos, siempre ocultando el rostro bajo un sombrero, y siempre enfundados en gabardinas; me refiero a las aseguradoras de bonos, más conocidos por“monolines”, que no son más que los que, en la práctica, han de respaldar con solvencia (ahora puesta en entredicho) todo el volumen de dinero de las titulizaciones que se han movido, a partir de la puesta en marcha de esta diabólica orgía hipotecaria.

Conclusión. Los bancos no desean la venta directa de pisos. Su negocio es poner el dinero con el que se financian las transacciones. Por tanto, un parón en la venta de los activos que la banca ha financiado, significa un dolor de cabeza adicional para ésta.

Un montón de clientes que se declaren insolventes no son plato de buen gusto para la banca. Ésta prefiere negociar antes que ir a reclamar a los tribunales. Lo primero siempre es más rentable.
La banca española no lo está pasando nada bien. En caso contrario, no habría solicitado tantas decenas de miles de millones al BCE.

Amigos, se ha dilapidado una fortuna. Se ha tirado por la borda una oportunidad, no sé, si irrepetible, de tomar la senda del desarrollo tecnológico. Ahora hemos de intentar sacar una lección positiva y una enseñanza, de todo esto, con el fin de evitar la repetición de esta tragicomedia del “atracón de pan para hoy y, hambre y deuda para nuestros descendientes, durante mucho tiempo.”

“El Lazarillo” le ha podido al sabio.

Lo mejor está por llegar.

Buenos días y…, buena suerte.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay amigo, el problema es que el negocio de los bancos siempre ha sido prestar el dinero que no tienen, lo de las comisiones es algo moderno y en tiempo de crisis es con lo que cuenta. Si todos los clientes intentasemos sacar nuestro dinero a la vez nos ibamos a enterar de la realidad...
Creo (y espero no equivocarme) que no van a tardar mucho en subir el salario minimo ya que si se quiere salir de esta crisis hay que poder pagar los creditos.

krollian dijo...

Anónimo:
Visita los enlaces que tengo a la derecha de la bitácora en la categoría denominada El Ladrillazo. Si mucha más gente tuviese realmente mas conocimiento en general (y unas nociones mínimas de economía en particular) otro gallo cantaría. Cierto es también que no hay más ciego que el que no quiere ver y hay por ahí individuos que malgastando y que aún con dificultades económicas importantes encima contratan más tarjetas de crédito.
Yo saco en metálico el día de cobro lo que creo que voy a gastar y la tarjeta de crédito la uso muy, muy poco. Uso anecdótico diría yo.
No se puede contar con dinero que no se tiene...
En fin. un tema largo...

krollian dijo...

Pasado mucho tiempo se me ocurre una reflexión para el Anónimo del 21 de mayo de 2008:

La entrada del 22 de enero de 2013. Si se cobra una miseria de salario se acabará por hundir a muchos. Incluso un país.

http://elciudadanocabreao.blogspot.com.es/2013/01/palabras-de-gasolina-cuando-el-tiburon.html