04 mayo 2010

La plaza de Arriquibar y la Alhóndiga. Despilfarrando el dinero

Si todavía queda algún inocente que duda del despilfarro que se hacen con los dineros que todos ponemos de nuestro bolsillo, aqui hay otro flagrante ejemplo más.
¿Que hay responsables? Seguro. ¿Que van a dimitir? Tal vez. ¿Que puedan pasar a a estar en mejor situación económica y laboral tras una posible dimisión? Uy...

4-5-2010
El Correo
Edición Vizcaya
LUIS GÓMEZ BILBAO
Levantan el pavimento de Arriquibar dos semanas después de terminarlo
El Ayuntamiento aduce que el mortero impreso con que se revistió el suelo «estaba dañado» y decide asfaltar el firme
A menos de quince días para la inauguración de AlhóndigaBilbao, la zona contigua a la plaza Arriquibar por la que circulan a diario miles de vehículos continúa inmersa en obras. Los operarios encargados de la urbanización del entorno del viejo almacén de vinos despertaron el pasado domingo a numerosos vecinos de Indautxu con los ruidos de las rozadoras. Los trabajadores se metieron en faena desde primeras horas de la mañana y comenzaron a levantar el suelo que habían terminado de pavimentar sólo dos semanas antes. Aprovecharon la baja densidad circulatoria para poner patas arriba la zona y reasfaltar el firme «causando las menores molestias a los ciudadanos».
Bajo la supervisión de Philippe Starck, la apertura de AlhóndigaBilbao, prevista para el 18 de este mes, ha cuidado hasta el último detalle la estética, tanto interior como exterior, de un edificio con el que se pretende revolucionar la vida cultural, social y deportiva de la ciudad. Por eso, el Ayuntamiento y el arquitecto francés optaron por adecuar la urbanización de las calles que rodean el histórico inmueble -Alameda de Urquijo, Iparraguirre, Alameda Recalde y Fernández del Campo- a las directrices de una restauración basada en la sobriedad.
En medio de ese entorno, la plaza Arriquibar jugó un papel estratégico que Starck supervisó de forma personal para integrarla en el resto del conjunto arquitectónico. De forma casi artesanal, los operarios, martillo en mano, comenzaron a revestir el suelo de estas cuatro arterias a mediados del pasado marzo con mortero impreso, «como si estuvieran cubiertas de 2.000 metros cuadrados de grandes alfombras y 5.500 de otra textura». El interiorista galo pretendía extender al resto del lugar el «ambiente acogedor y doméstico» del centro cultural.

Como losetas
El pavimento especial elegido por el departamento de Obras y Servicios se asemejaba a los elegantes empedrados que jalonan los cascos históricos de numerosas ciudades. El diseño recibió el aplauso de numerosos transeúntes gracias al efecto trampantojo, ya que el suelo parecía revestido, aparentemente, de losetas que recordaban a las viejas baldosas que se pisaban antaño en la villa.
Sin embargo, la sorpresa ha durado bastante menos de lo esperado y obligado al Consistorio a recular. Responsables del área que dirige José Luis Sabas admitieron que el mortero impreso empleado en las obras estaba «dañado», por lo que «no alcanzaba» los niveles «suficientes» de calidad técnica de edificación. Al tratarse de un material «deteriorado», la adjudicataria decidió utilizar, tras recibir el permiso del Ayuntamiento, otra clase de masa que no permitía, sin embargo, la realización de las «formas, colores y dibujos» de la usada en un principio.
El mortero impreso retirado tampoco cumplía los parámetros de «resistencia» para «soportar» la elevada carga de tráfico que sufre la zona. «No había, en cambio, ningún problema para garantizar el tránsito peatonal», zanjaron portavoces municipales.

1 comentario:

  1. Preferiría que recuperaran la plaza Arriquibar anterior.

    El interior de la alhondiga es impresionante, y la oscuridad no está mal, solo que es dificil localizar las salidas o por donde se van a las instalaciones.

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