Javier Burón demanda atención. Viceconsejero de Vivienda es su nueva misión

El señor que se muestra a la izquierda en la fotografía tiene desde hace nada una responsabilidad clave. Si este nuevo cargo demuestra tener tanta eficacia como claridad en sus ideas y exposiciones, desde luego la situación de la problemática de la vivienda debería va a marcar un progreso esperanzador. En este caso la intención es lo cuenta. Pero que sólo se quedase en eso, en intención sería la muestra de la falta de la voluntad política de nuestros sufridos gestores políticos. El tiempo dirá. De cualquier modo todo lo que llegue a paliar el grave estado de la cosa siempre llegará tarde. Y ya que estamos refraneros esperemos que sea tarde (por hoy mismo para empezar a aplicar políticas definitivas, reales y concretas) que nunca...

8-9-2007
Diario El Correo
Edición Vizcaya
J. MUÑOZ
j.munoz@diario-elcorreo.com
NUEVO VICECONSEJERO DE VIVIENDA
Javier Burón: «El lehendakari apoya el canon sobre las viviendas vacías»
Subraya que la futura Ley de Vivienda es un reto de todo el Gobierno tripartito y ofrece su colaboración a los ayuntamientos vascos
Ocupa desde ayer el área 'estrella' de la consejería de Ezker Batua. Si su predecesor, Javier Dean, sacó adelante la Ley vasca del Suelo en una etapa de optimismo inmobiliario, Javier Burón negociará la futura Ley de Vivienda con los grupos parlamentarios en un periodo de pesimismo financiero y de gran preocupación por las dificultades que encuentran amplios sectores sociales, principalmente los jóvenes, para acceder a un piso.
El viceconsejero ha tenido un papel protagonista en la redacción del actual anteproyecto, que grava los pisos vacíos con un canon autonómico; obliga al dueño de una vivienda de protección oficial (VPO) a abandonarla si compra otro inmueble; y garantiza el derecho de los vascos a exigir, a partir de 2012, un alojamiento de alquiler que no se lleve más del 30% de sus ingresos, una medida dirigida especialmente a los 'mileuristas'. Burón recalca que la Ley de Vivienda no es una apuesta del Departamento de Madrazo, sino de todo el Gobierno tripartito, y ofrece una mano tendida a los ayuntamientos vascos.
-La Junta de Andalucía acaba de anunciar que también garantizará un piso asequible a los ciudadanos.
-Es una buena noticia, sin perjuicio de que los andaluces elaboren su modelo y nosotros, el nuestro. No existe ninguna justificación para que una sociedad rica y moderna tenga un problema de vivienda como el actual. Durante los últimos 20 o 25 años, Euskadi ha logrado la convergencia con Europa en las áreas de Educación y de Sanidad; es hora de que la vivienda reciba un tratamiento similar.
-¿Pero hasta el punto de que los dueños de una VPO la dejen si adquieren otro piso?
-Es una medida razonable. Nos consta que ha suscitado un amplio consenso político y parlamentario Le recuerdo cómo estaban las VPO en 2001. Para empezar, se construían la mitad que ahora. Perdían la calificación al cabo de un tiempo y se integraban en el mercado libre. Casi todas se adjudicaban en régimen de propiedad; en algunos casos, por sorteo, pero en otros, sin seguir ningún procedimiento ¿Qué imagen le quedaba a la ciudadanía? Que una persona podía hacer un buen negocio con una inversión de la colectividad.

«Nos queda un paso»
-De todos modos, los vascos no ha dejado de contemplar las VPO como el premio de la lotería. Hay 55.700 pisos protegidos en Euskadi.
-Pero ahora se verifica la situación de las personas inscritas en las listas de Etxebide. Se controlan el uso de las viviendas y de las segundas transmisiones. Podemos llegar incluso a la expropiación. Ciertamente, todavía nos queda un paso para convertir los pisos protegidos en un verdadero servicio público y no en un producto 'casi' de mercado.
-¿A qué se refiere?
-Nosotros comprobamos los ingresos de los inquilinos del parque de alquiler protegido. Es necesario para calcular la renta que deben pagar y para saber si superan el nivel económico que les dejaría fuera de la protección. A los usuarios les parece bien, pero nos han preguntado por qué no hacemos lo mismo con las viviendas protegidas que se adjudican en propiedad y en derecho de superficie (para 75 años).
-Pues los afectados se han quejado enseguida. ¿No se pueden comprar un piso de veraneo?
-¿Es razonable que, cuando el propietario de una VPO mejora económicamente, ese cambio se manifieste, precisamente, comprándose otra residencia? Es cierto que puede tratarse de una segunda vivienda, pero todos sabemos que otras veces se convierte en la primera y la VPO se deja ociosa.
-La Diputación de Vizcaya quiere construir pisos tasados que puedan venderse en el mercado libre al cabo de 15 años. Lo defendió el diputado foral, José Luis Bilbao, en la pasada campaña electoral.
-Pues no sé. Eso ya está resuelto por la Ley del Suelo vasca, aprobada el verano de 2006. Las viviendas tasadas son de protección pública, así que la calificación es permanente. Hay vivienda tasada autonómica, municipal
-¿Y no hay tasada foral?
-No, no. Forzosamente tienen que convertirla en municipal, porque las diputaciones carecen de competencias en vivienda. El plan de la Diputación de Vizcaya para edificar pisos deberá acomodarse a las categorias de la Ley del Suelo Aunque ya veremos si lo mantienen.
-¿Por qué lo dice?
-La Diputación de Guipúzcoa ha dicho que va a reconvertir su plan de vivienda para converger con los ayuntamientos y con el Gobierno vasco. Lo más probable es que la Diputación vizcaína haga tasadas municipales Eso quiere decir que se adjudicarán por sorteo, los aspirantes serán ciudadanos de unas determinadas características; los pisos no se descalificarán nunca y estarán sometidas a inspección, a tanteo y retracto

Cumplir la ley
-¿Y no es posible una categoría 'híbrida' entre viviendas libres y públicas?
-Lo bueno de la Ley del Suelo es que, como ha costado tanto negociarla entre todos, ofrece un marco sólido que nadie se va a saltar. No me cabe duda de que la Diputación de Vizcaya cumplirá con la ley.
-¿Se repetirán los enfrentamientos que Javier Dean tuvo con los alcaldes?
-Los ciudadanos no nos van a perdonar las peleas institucionales. El municipalismo vasco es maduro y sabe hacer las cosas bien. Necesita respeto porque no es parte del problema de la vivienda, sino parte de la solución. Ése fue el discurso de Eudel (Asociación de municipios vascos) durante la negociación de la Ley del Suelo y nos parece acertado. Estamos en un momento bonito. La ley ya se aprobó, los equipos municipales se han renovado después de las elecciones; se ha producido un relevo en la viceconsejería, aunque el grupo permanece Los ayuntamientos deben jugar un papel en la promoción de vivienda protegida, el alquiler, la rehabilitación, la vivienda vacía
-De momento, varios alcaldes del PNV y el actual presidente de ese partido, Josu Jon Imaz, han atacado con dureza el canon de los pisos desocupados. ¿El lehendakari lo apoya? Y disculpe por la pregunta capciosa.
-No es una pregunta capciosa. El lehendakari apoya el canon sobre las viviendas vacías. Es el líder del Gobierno vasco y comparte las apuestas estructurales del anteproyecto de Ley de Vivienda. Otra cosa es que luego tengamos que hacer ajustes para enviar el proyecto de ley al Parlamento vasco.
-También deberán negociar con los grupos de la Cámara, porque el tripartito no tiene mayoría.
-Mi sensación es que ni el PNV, ni el PSE ni los demás grupos, salvo el PP, son contrarios al principio de que la vivienda es un mercado, pero también un derecho que requiere políticas activas: rehabilitar viviendas, construir pisos protegidos, dedicar al alquiler una parte sustancial de ese parque inmobiliario público; regenerar espacios urbanos, movilizar viviendas vacías

La 'okupación'
-¿Y los ciudadanos entenderán un nuevo impuesto de nueve euros diarios para los inmuebles en desuso?
-En Francia, el prefecto puede decretar el alquiler obligatorio de una vivienda. Inglaterra contempla incluso venta forzosa. En Alemania y Dinamarca, un edificio entero puede ser demolido. En Holanda, la 'okupación' no figura en el Código Penal. Algunos alcaldes holandeses han advertido de que los 'okupas' permiten sacar viviendas vacías al mercado, ya que, antes de desalojarles, el juez exige al propietario del inmueble que presente un contrato de alquiler.
-¿Esas medidas llegarán a Euskadi?
-Nadie está pensando en ello, pero es evidente que los países europeo serios toman medidas severas con los pisos vacíos.
-Sin la amenaza del canon, el programa del Gobierno vasco para movilizar esas viviendas desocupadas hacia el alquiler social (Bizigune) sólo ha atraído entre 3.000 y 4.000 inmuebles. Según el PSE, cuesta demasiado dinero.
-Los socialistas vascos son un activo importante y hay que escucharles. Pero los responsables de Vivienda en otras comunidades, incluidas las gobernadas por el PSOE, no dicen lo mismo que ellos. Les gustaría copiar la idea de Bizigune, pero no tienen fondos suficientes. Y cuando tienen esos fondos, la copian. El programa supone un gasto, pero es rentable en términos ecológicos y sociales. Todavía no se ha inventado la forma de poner en marcha un proyecto sin gente y sin dinero.